Las carreras hípicas siempre se caracterizaron por ser tan apasionantes que se tornaron el evento más popular e importante de apuestas a nivel mundial. Los veloces equinos son garantía de espectáculo pero, si querés ganar en el hipódromo, tenés que saber elegir a los ganadores tal como a continuación te contamos.
Los especialistas en turf consideran que en los hipódromos congregan a cuatro categorías de apostadores que se diferencian por sus conocimientos desde los principiantes hasta los expertos en el mundo equino.
Los principiantes puros y duros son quienes van por primera vez a un hipódromo y suelen elegir a los favoritos para hoy por el nombre del caballo, el color de su stud y/o la vestimenta del jockey. Esencialmente conservadores a la hora de apostar su dinero, se caracterizan por ser algo indecisos ya que son más observadores que jugadores. Con ánimo de pasar una tarde en un universo desconocido, suelen aburrirse mucho antes de lo previsto.
Otro grupo de estos novatos no se fija precisamente en el nombre del equino ni la casaca del jinete porque, los días previos, se informan sobre estadísticas y diagraman su visita al hipódromo con la minuciosidad con que la NASA planifica el lanzamiento de las naves espaciales. La confianza se disipa ni bien arriban a la pista, ahí comprenden que, si bien aprendieron cosas nuevas, lo que hicieron no sirve para nada. Luego están los intermedios, gente que ya tiene una cierta andadura en el mundo hípico. Se caracterizan por elegir apuestas un poco más sofisticadas, y por los ítems que consideran antes de hacer sus jugadas. Por ejemplo: el nombre del entrenador, si hubo cambios de último momento en el haras, el comportamiento del caballo en el corral y los resultados obtenidos en las últimas carreras sin dejar de comparar las probabilidades ante sus rivales.
Y por último tenemos aquellos que eligen a los favoritos para hoy basándose en un cálculo que empieza descartándose a los caballos perdedores consuetudinarios, los menos rápidos o a aquellos que están sobrevalorados según los expertos. Y dividen a los demás en los líderes que ganan con cierta frecuencia, hacen otro grupo con lo que en las últimas carreras han quedado segundos o terceros y uno más con los últimos, los de menores posibilidades de triunfar o de quedar entre los cinco primeros.
Como vemos, en un foro hípico hay bastante más que caballos para observar. Los comportamientos de los concurrentes también presentan mucho interés, sobre todo si nos gusta estudiar la naturaleza humana.