La noticia resultó tan insólita como lamentable, un desafío deportivo terminó en una tragedia que pronto tomó estado público a través de las redes sociales. De acuerdo a lo informado por el Daily Mail de Sudáfrica, el golfista Jacques van der Sandt murió tras ser atacado por un cocodrilo cuando intentaba rescatar unas pelotas que estaban en el fondo del lago del Shuzuka Golf Club del parque nacional Kruger.
Como forma de ganarle una apuesta a un amigo para saber quien era capaz de encontrar la mayor cantidad de pelotas extraviadas en el lago de la cancha, el golfista de veintinueve años se metió en plena noche hasta tener el agua a la altura de su cintura siendo mordido repetidas veces por un reptil de cuatro metros de largo.
Alertados por el testigo que acompañaba al golfista Van der Sandt , cuyo cuerpo horas después fue encontrado con marcas de dientes tanto en la espalda como en el pecho, oficiales de la polícia sudafricana mataron al animal cuando se aprestaba a salir del lago rumbo a otra zona del parque nacional Kruger, la mayor reserva natural sudafricana donde esta temporada ya se reportaron 280 ataques de reptiles de acuerdo a CocBRITE, sitio web que registra todos los casos en que cocodrilos atacan a seres humanos.
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