No subió al podio del Tour de France ni se vistió con el maillot arco iris que identifica a los campeones mundiales de ciclismo pero batió una plusmarca global de velocidad. Francois Gissy estableció el récord mundial de velocidad arriba de una bicicleta tras alcanzar los 333.1 kilómetros por hora en menos de cinco segundos gracias a la propulsión de tres motores de cohete con los que derrotó a una cupé Ferrari F430.
En la pista del autódromo galo de Le Castallet, Francois Gissy piloteó la bicicleta diseñada por su amigo Arnold Neracher que ideó este rodado impulsado por peróxido de nitrógeno altamente concentrado que, en apenas 250 metros, trepó a los 333.1 kilómetros por hora.
Tags: bicicleta